Luego de una trilogía de renombradas competencias de luchas asociadas llevadas a cabo en Acapulco, Guerrero, incluido un Clasificatorio Olímpico Panamericano, el presidente de la Federación Medallistas de la especialidad (FEMELA), Guillermo Díaz Gutiérrez, consideró logrado el objetivo en cuanto al nivel de los atletas mexicanos, así como en la respuesta del público de dicha entidad.
“Esta serie de eventos en nuestro país fue algo inusual, y nosotros la organizamos: el Campeonato Panamericano, el Clasificatorio Panamericano y la Serie Mundial de Lucha de Playa, que se realizó por primera vez en América y que constará de cuatro etapas”, dijo.
“Por el desastre natural ocurrido en Acapulco, la Confederación Panamericana de Luchas Asociadas (CPLA) quería que estas competencias se realizaran en otras partes del continente; sin embargo, con el apoyo de la Conade logramos llevar a cabo con gran calidad los torneos. Estamos hechos para esto y para albergar otras justas de más nivel”, añadió.
Los representativos aztecas que vieron acción en las justas brillaron con luz propia, ya que se obtuvieron diez medallas y el subcampeonato en el Panamericano, seis preseas y el primer puesto en ambas ramas de lucha de playa, y especialmente dos cuotas en estilo libre a los Juegos Olímpicos París 2024, gracias a los sobresalientes desempeños de Román Bravo y Austin Gómez.