Luego de una prolongada lesión en la rodilla, Raúl Jiménez regresó a la actividad y tuvo su primera titularidad con el Wolverhampton, en esta ocasión ante el Preston North End, en la segunda ronda de la Carabao Cup.
El ariete mexicano adelantó a los Wolves desde el minuto 8 empujando el balón a la red sin complicación, luego de una buena jugada grupal y con asistencia del lateral francés Rayan Ait-Nouri.
Lo destacado de la jugada fue que el canterano americanista, más allá de regresar a la senda del gol luego de 166 días, volvió a patentar su celebración como pirata, pero ahora lo llevó al siguiente nivel y causó furor en redes sociales, pues Jiménez utilizó su protección de la cabeza y sacó un garfio escondido en el estadio Mollineux.
Como ya era una costumbre desde que empezó a utilizar una ligera protección para su cráneo, el seleccionado azteca comenzó a cubrirse un ojo y simular ser un pirata tras marcar un gol, pero ahora utilizó un garfio de juguete que enmarcó por completo su intención.
De inmediato en redes se empezó a ser viral su imagen y lo apodaron “Capitán Garfio”, pues cumplió con todos los requisitos para convertirse en tal personaje, múltiples veces representado en televisión, películas y caricaturas.
Cuentas globales reconocieron al oriundo de Tepeji del Río, pues se ha convertido en un elemento que suele tener festejos peculiares, con las acrobacias y máscara de luchador como los principales distinticos en el pasado.
Al final el resultado del partido fue 2-1 a favor de los Wolves de Raúl Jiménez. El mexicano participó con la primera anotación y disputó 86 minutos de juego, por lo que confirmó su regreso a óptimas condiciones luego de una lesión que lo mantuvo alejado varias semanas.
Este es el primer gol oficial de Jiménez luego de casi seis meses, por lo que fue sumamente celebrado por él mismo y el entorno mexicano, ya que es uno de los elementos que se espera retomen su máximo nivel previo al Mundial de Qatar.