Hugo Martínez Zapata
El todavía invicto y excampeón mundial supergallo, el mexicano Rey Vargas, dio la campanada al derrotar por decisión dividida al filipino Mark “Magnífico” Magsayo, para conquistar el título mundial pluma del Consejo Mundial de Boxeo (WBC, por sus siglas en inglés), en el choque estelar de una cartelera que se llevó a cabo en el Alamodome de San Antonio, Texas.
El Magnífico” Magsayo llegó como campeón a este combate, y lo hizo con muy buenos antecedentes porque en su pelea de enero pasado, se coronó al derrotar al duradero Gary Allen Russell Jr.
Sin embargo, Vargas hizo un buen trabajo, boxeó con inteligencia en la segunda mitad del combate, para imponerse en dos tarjetas 115-112 y 115-112, mientras que un tercer lateral se inclinó al filipino 114-113, confirmando lo intenso y cerrado que resultó el combate.
Magsayo derribó a Vargas en el noveno round, pero Vargas estuvo mucho más ocupado durante toda la pelea, para llevarse la victoria por la mínima.
Desde el primer round, Magsayo lució un buen empuje, lanzando con mucha potencia su derecha. Vargas le dio la espalda a Magsayo después de recibir lo que parecía ser un golpe permisible en el cuerpo que Vargas afirmó que era bajo con poco más de un minuto para el final del asalto.
En el sexto, Vargas sigue boxeando a distancia, pero Magsayo nunca deja de presionar. Se produce un corte a Vargas en la ceja izquierda al final de round, por un choque de cabezas.
En el noveno, Magsayo manda a la lona a Vargas con un cruzado de mano derecha. Fue un golpeo en corto, pero muy certero. No le dio tiempo a rematar.
Magsayo sigue con su intensidad en el décimo. Después de derribar a Vargas con una mano derecha en el noveno asalto, Magsayo lo sacudió con otra mano derecha un minuto después del décimo asalto.
En el round 11, Vargas saca una mejor calificación, al lanzar golpes de poder que estremecieron a Magsayo. Una izquierda dura puso en malas condiciones al filipino, quien siguió mostrando una resistencia granítica.
En el round 12, un gancho de izquierda de Magsayo hizo que Vargas lo sostuviera con poco más de 1:30 de tiempo para el final. Magsayo no pudo conectar otro golpe dañino antes de que terminara su pelea porque Vargas sabiamente mantuvo su distancia y se desplazó con toda la velocidad posible, por todo el ring.
Con este triunfo, Vargas conquistó su segundo título en igual cantidad de divisiones, para mejorar su palmarés a 36-0, con 22 nocauts, mientras que Magsayo cayó a 24-1, con 16 nocauts. Con la derrota de Magsayo, ésta es la primera vez en los últimos 21 años, que Filipinas se queda sin un campeón mundial.